El secuestro
Te presento a Nati.
Es una cabeza de maniquí que nos dejaron un día en Terral, en el suelo, justo mirando al sitio donde tienes que pasar para abrir el local. Imagínate el susto cuando Lola llega para trabajar y se encuentra una cabeza en el suelo mirándola. Tremendo.
Son de estas cosas que dan muy mal rollo, porque te pones a pensar el motivo por el qué te la han dejado, qué querrán decir, quién será el que quiere asustarte; incluso llegamos a pensar que cada día nos entregarían una parte de la muñeca, un día una mano, otro día un pie, en fin estas cosas.
Bueno pues lo que haría cualquiera sería tirarla y Santas Pascuas, a seguir el día, pero claro no estamos hablando de alguien normal, como ya sabes el blog se llama perder la cabeza, y yo que la pierdo con frecuencia pues ese día decidí rescatar la cabeza de la basura y colocarla en la casita de la playa; Lola, que también tiene lo suyo, bautizo a la muñeca como Nati, en honor a una clienta muy rara, pero rara, que hemos tenido este verano.
Y Nati ha estado con nosotros todos estos días, le hemos cogido cariño, cada día la poníamos en un sitio, a veces junto al árbol, otras en el suelo, unas veces en alto y otras en bajo, así los clientes habituales han estado toda la semana intentando averiguar donde estaba, en plan "buscando a wally" pero con Nati.
Las peluqueras del palo querían hacerle un moldeador, unos extranjeros que vinieron a desayunar se hicieron fotos con ella y un día la llevamos en bici, grandes aventuras con nuestra cabeza.
Pero hoy es un día triste, han secuestrado a Nati.
Es un gran vacío.
No tenemos consuelo, no hay nota, no han pedido rescate, no existen datos con los que iniciar la investigación, Nati no está.
Sí tienes algún dato o pista, llámanos.